22 DE AGOSTO VIERNES XX DEL T. ORDINARIO SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA REINA
Del Común de la santísima Virgen María. Salterio IV
LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA, REINA (MEMORIA).
OFICIO DE LECTURA
Si el Oficio de Lectura es la primera oración del día:
V. Señor abre mis labiosR. Y mi boca proclamará tu alabanza
Se añade el Salmo del Invitatorio con la siguiente antífona:
Ant. Adoremos a Cristo, nuestro rey, que ha coronado como reina a María, su madre.
Salmo 94 INVITACIÓN A LA ALABANZA DIVINA
Venid, aclamemos al Señor,demos vítores a la Roca que nos salva;entremos a su presencia dándole gracias,aclamándolo con cantos.
Porque el Señor es un Dios grande,soberano de todos los dioses:tiene en su mano las simas de la tierra,son suyas las cumbres de los montes;suyo es el mar, porque él lo hizo,la tierra firme que modelaron sus manos.
Venid, postrémonos por tierra,bendiciendo al Señor, creador nuestro.Porque él es nuestro Dios,y nosotros su pueblo,el rebaño que él guía.
Ojalá escuchéis hoy su voz:«No endurezcáis el corazón como en Meribá,como el día de Masá en el desierto;cuando vuestros padres me pusieron a pruebay dudaron de mí, aunque habían visto mis obras.
Durante cuarenta añosaquella generación me repugnó, y dije:Es un pueblo de corazón extraviado,que no reconoce mi camino;por eso he jurado en mi cóleraque no entrarán en mi descanso»
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Adoremos a Cristo, nuestro rey, que ha coronado como reina a María, su madre.
Si antes del Oficio de lectura se ha rezado ya alguna otra Hora:
V. Dios mío, ven en mi auxilioR. Señor, date prisa en socorrerme
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.
Himno: ASIDOS A TU FALDA
Asidos de tu falda, con los ojosagrandados de asombro, con las manosapretadas de miedos y de enojos…
¡Pobres manos vacías de tus hijos!Ojos que alzan del suelo su vergüenzapara quedar en tu mirada fijos;
ojos que te confían nuestros sueños,manos que aprietan nuestras esperanzas:-si somos, ante ti, niños pequeños-.
Con las manos así, con la miradallena de la alba virgen de tus ojos,te llamamos: dulcísima abogada. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Dios mío, no te cierres a mi súplica, pues me turba la voz del enemigo.
Salmo 54, 2-15. 17-24 I – ORACIÓN ANTE LA TRAICIÓN DE UN AMIGO
Dios mío, escucha mi oración,no te cierres a mi súplica;hazme caso y respóndeme,me agitan mis ansiedades.
Me turba la voz del enemigo,los gritos del malvado:descargan sobre mí calamidadesy me atacan con furia.
Se estremece mi corazón,me sobrecoge un pavor mortal,me asalta el temor y el terror,me cubre el espanto,
y pienso: «¡Quién me diera alas de palomapara volar y posarme!Emigraría lejos,habitaría en el desierto,
me pondría en seguida a salvo de la tormenta,del huracán que devora, Señor;del torrente de sus lenguas.»
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Dios mío, no te cierres a mi súplica, pues me turba la voz del enemigo.
Ant 2. El Señor nos librará del poder de nuestro enemigo y adversario.
Salmo 54, 2-15. 17-24 II
Violencia y discordia veo en la ciudad:día y noche hacen la rondasobre las murallas;
en su recinto, crimen e injusticia;dentro de ella, calamidades;no se apartan de su plazala crueldad y el engaño.
Si mi enemigo me injuriase,lo aguantaría;si mi adversario se alzase contra mí,me escondería de él;
pero eres tú, mi compañero,mi amigo y confidente,a quien me unía una dulce intimidad:juntos íbamos entre el bulliciopor la casa de Dios.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. El Señor nos librará del poder de nuestro enemigo y adversario.
Ant 3. Encomienda a Dios tus afanes, que él te sustentará.
Salmo 54, 2-15. 17-24 III
Pero yo invoco a Dios,y el Señor me salva:Por la tarde, en la mañana, al mediodía,me quejo gimiendo.
Dios escucha mi voz:su paz rescata mi almade la guerra que me hacen,porque son muchos contra mí.
Dios me escucha, los humillael que reina desde siempre,porque no quieren enmendarseni temen a Dios.
Levantan la mano contra su aliado,violando los pactos;su boca es más blanda que la manteca,pero desean la guerra;sus palabras son más suaves que el aceite,pero son puñales.
Encomienda a Dios tus afanes,que él te sustentará;no permitirá jamásque el justo caiga.
Tú, Dios mío, los harás bajar a ellosa la fosa profunda.Los traidores y sanguinariosno cumplirán ni la mitad de sus años.Pero yo confío en ti.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Encomienda a Dios tus afanes, que él te sustentará.
V. Hijo mío, haz caso de mi sabiduría.R. Presta oído a mi inteligencia.
PRIMERA LECTURA
De la carta a los Efesios 3, 14-21
PABLO PIDE QUE LOS FIELES CONOZCAN EL AMOR DE CRISTO
Hermanos: Doblo las rodillas ante el Padre que da el apellido a toda familia en cielo y tierra, pidiéndole que, mostrando la riqueza de su gloria, os refuerce y robustezca interiormente con su Espíritu y así Cristo habite por la fe en lo íntimo de vosotros.
Arraigados y cimentados en el amor, tendréis vigor para comprender, con todos los consagrados, lo que es anchura y largura, altura y profundidad; y para conocer, aunque sobrepasa todo conocimiento, el amor que Cristo nos tiene, llenándoos de la plenitud total de Dios.
A aquel que tiene sumo poder para hacer muchísimo más de lo que pedimos o pensamos, con la energía que obra en nosotros, a él la gloria en la Iglesia y en Cristo Jesús, en todas las generaciones por los siglos de los siglos. Amén.
RESPONSORIO Ef 3, 20. 21; Ga 1, 4
R. A aquel que tiene sumo poder para hacer muchísimo más de lo que pedimos o pensamos, * a él la gloria en la Iglesia y en Cristo Jesús, en todas las generaciones por los siglos de los siglos.V. Jesucristo se entregó a sí mismo por nuestros pecados, según la voluntad de nuestro Dios y Padre.R. A él la gloria en la Iglesia y en Cristo Jesús, en todas las generaciones por los siglos de los siglos.
SEGUNDA LECTURA
De las Homilías de san Amadeo de Lausana, obispo(Homilía 7: SC 72, 188. 190. 192. 200)
REINA DEL MUNDO Y DE LA PAZ
Observa cuán adecuadamente brilló por toda la tierra, ya antes de la asunción, el admirable nombre de María y se difundió por todas partes su ilustre fama, antes de que fuera ensalzada su majestad sobre los cielos. Convenía, en efecto, que la Madre virgen, por el honor debido a su Hijo, reinase primero en la tierra y, así, penetrara luego gloriosa en el cielo; convenía que fuera engrandecida aquí abajo, para penetrar luego, llena de santidad, en las mansiones celestiales, yendo de virtud en virtud y de gloria en gloria por obra del Espíritu del Señor.
Así pues, durante su vida mortal gustaba anticipadamente las primicias del reino futuro, ya sea elevándose hasta Dios con inefable sublimidad, como también descendiendo hacia sus prójimos con indescriptible caridad. Los ángeles la servían, los hombres le tributaban su veneración. Gabriel y los ángeles la asistían con sus servicios; también los apóstoles cuidaban de ella, especialmente san Juan, gozoso de que el Señor, en la cruz, le hubiese encomendado su madre virgen, a él, también virgen. Aquéllos se alegraban de contemplar a su reina, éstos a su señora, y unos y otros se esforzaban en complacerla con sentimientos de piedad y devoción.
Y ella, situada en la altísima cumbre de sus virtudes, inundada como estaba por el mar inagotable de los carismas divinos, derramaba en abundancia sobre el pueblo creyente y sediento el abismo de sus gracias, que superaban a las de cualquiera otra creatura. Daba la salud a los cuerpos y el remedio para las almas, dotada como estaba del poder de resucitar de la muerte corporal y espiritual. Nadie se apartó jamás triste o deprimido de su lado, o ignorante de los misterios celestiales. Todos volvían contentos a sus casas, habiendo alcanzado por la madre del Señor lo que deseaban.
Plena hasta rebosar de tan grandes bienes, la esposa, madre del esposo único, suave y agradable, llena de delicias, como una fuente de los jardines espirituales, como un pozo de agua viva y vivificante, que mana con fuerza del Líbano divino, desde el monte de Sión hasta las naciones extranjeras, hacía derivar ríos de paz y torrentes de gracia celestial. Por esto, cuando la Virgen de las vírgenes fue llevada al cielo por el que era su Dios y su Hijo, el rey de reyes, en medio de Ia alegría y exultación de los ángeles y arcángeles y de la aclamación de todos los bienaventurados, entonces se cumplió la profecía del Salmista, que decía al Señor: De pie a tu derecha está la reina enjoyada con oro de Ofir.
RESPONSORIO Ap 12, 1; Sal 44, 10
R. Una gran señal apareció en el cielo: una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies, * y una corona de doce estrellas sobre su cabeza.V. De pie a tu derecha está la reina enjoyada con oro de Ofir.R. Y una corona de doce estrellas sobre su cabeza.
ORACIÓN.
OREMOS,Señor, Dios nuestro, que nos has dado como madre y como reina a la Madre de tu Hijo, concédenos que, protegidos por su intercesión, alcancemos la gloria que tienes preparada a tus hijos en el reino de los cielos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.Amén
CONCLUSIÓN
V. Bendigamos al Señor.R. Demos gracias a Dios.
LAUDES
(Oración de la mañana)
INVOCACIÓN INICIAL
V. Señor abre mis labiosR. Y mi boca proclamará tu alabanza
INVITATORIO
Ant. Adoremos a Cristo, nuestro rey, que ha coronado como reina a María, su madre.
Salmo 94 INVITACIÓN A LA ALABANZA DIVINA
Venid, aclamemos al Señor,demos vítores a la Roca que nos salva;entremos a su presencia dándole gracias,aclamándolo con cantos.
Porque el Señor es un Dios grande,soberano de todos los dioses:tiene en su mano las simas de la tierra,son suyas las cumbres de los montes;suyo es el mar, porque él lo hizo,la tierra firme que modelaron sus manos.
Venid, postrémonos por tierra,bendiciendo al Señor, creador nuestro.Porque él es nuestro Dios,y nosotros su pueblo,el rebaño que él guía.
Ojalá escuchéis hoy su voz:«No endurezcáis el corazón como en Meribá,como el día de Masá en el desierto;cuando vuestros padres me pusieron a pruebay dudaron de mí, aunque habían visto mis obras.
Durante cuarenta añosaquella generación me repugnó, y dije:Es un pueblo de corazón extraviado,que no reconoce mi camino;por eso he jurado en mi cóleraque no entrarán en mi descanso»
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Himno: VIENES DEL TRONO DE DAVID
Vienes del trono de David profetay, radiante de luz, gloriosa brillasy, en carro de querubes, te levantas,Virgen María.
Recibes en tu seno inmaculadoal Hijo de quien eres sierva e hija;Dios en tu vientre virginal se humana,Virgen María.
Tú misma adoras, en tu casto seno,a quien el cielo adora de rodillasy a quien pedimos la celeste gloria,Virgen María.
Danos, Señor y Padre de las luces,que vives en eternas alegrías,habitar con la Reina de los cielos,Virgen María. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Oh Dios, crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro con Espíritu firme.
Salmo 50 – CONFESIÓN DEL PECADOR ARREPENTIDO
Misericordia, Dios mío, por tu bondad;por tu inmensa compasión borra mi culpa;lava del todo mi delito,limpia mi pecado.
Pues yo reconozco mi culpa,tengo siempre presente mi pecado:contra ti, contra ti solo pequé,cometí la maldad que aborreces.
En la sentencia tendrás razón,en el juicio brillará tu rectitud.Mira, que en la culpa nací,pecador me concibió mi madre.
Te gusta un corazón sincero,y en mi interior me inculcas sabiduría.Rocíame con el hisopo: quedaré limpio;lávame: quedaré más blanco que la nieve.
Hazme oír el gozo y la alegría,que se alegren los huesos quebrantados.Aparta de mi pecado tu vista,borra en mí toda culpa.
¡Oh Dios!, crea en mí un corazón puro,renuévame por dentro con espíritu firme;no me arrojes lejos de tu rostro,no me quites tu santo espíritu.
Devuélveme la alegría de tu salvación,afiánzame con espíritu generoso:enseñaré a los malvados tus caminos,los pecadores volverán a ti.
Líbrame de la sangre, ¡oh Dios,Dios, Salvador mío!,y cantará mi lengua tu justicia.Señor, me abrirás los labios,y mi boca proclamará tu alabanza.
Los sacrificios no te satisfacen;si te ofreciera un holocausto, no lo querrías.Mi sacrificio es un espíritu quebrantado:un corazón quebrantado y humilladotú no lo desprecias.
Señor, por tu bondad, favorece a Sión,reconstruye las murallas de Jerusalén:entonces aceptarás los sacrificios rituales,ofrendas y holocaustos,sobre tu altar se inmolarán novillos.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Oh Dios, crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro con Espíritu firme.
Ant 2. Alégrate, Jerusalén, porque en ti serán congregados todos los pueblos.
Cántico: ACCIÓN DE GRACIAS POR LA LIBERACIÓN DEL PUEBLO – Tb 13, 10-15. 17-19
Anuncien todos los pueblos sus maravillasy alábenle sus elegidos en Jerusalén,la ciudad del Santo;por las obras de tus hijos te azotará,pero de nuevo se compadeceráde los hijos de los justos.
Confiesa dignamente al Señory bendice al Rey de los siglos,para que de nuevo sea en tiedificado su tabernáculo con alegría,para que alegre en ti a los cautivosy muestre en ti su amor hacia los desdichados,por todas las generaciones y generaciones.
Brillarás cual luz de lámparay todos los confines de la tierra vendrán a ti.Pueblos numerosos vendrán de lejosal nombre del Señor, nuestro Dios,trayendo ofrendas en sus manos,ofrendas para el rey del cielo.
Las generaciones de las generacionesexultarán en ti.Y benditos para siempre todos los que te aman.
Alégrate y salta de gozo por los hijos de los justos,que serán congregados,y al Señor de los justos bendecirán.
Dichosos los que te aman;en tu paz se alegrarán.Dichosos cuantos se entristecieron por tus azotes,pues en ti se alegraráncontemplando toda tu gloria,y se regocijarán para siempre.
Bendice, alma mía, a Dios, rey grande,porque Jerusalén con zafiros y esmeraldasserá reedificada,con piedras preciosas sus murosy con oro puro sus torres y sus almenas.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Alégrate, Jerusalén, porque en ti serán congregados todos los pueblos.
Ant 3. Sión, alaba a tu Dios, que envía su mensaje a la tierra.
Salmo 147 – RESTAURACIÓN DE JERUSALÉN.
Glorifica al Señor, Jerusalén;alaba a tu Dios, Sión:que ha reforzado los cerrojos de tus puertasy ha bendecido a tus hijos dentro de ti;ha puesto paz en tus fronteras,te sacia con flor de harina.
Él envía su mensaje a la tierra,y su palabra corre veloz;manda la nieve como lana,esparce la escarcha como ceniza;
hace caer el hielo como migajasy con el frío congela las aguas;envía una orden, y se derriten;sopla su aliento, y corren.
Anuncia su palabra a Jacob,sus decretos y mandatos a Israel;con ninguna nación obró así,ni les dio a conocer sus mandatos.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Sión, alaba a tu Dios, que envía su mensaje a la tierra.
LECTURA BREVE Is 61,10
Desbordo de gozo en el Señor, y me alegro con mi Dios: porque me ha vestido un traje de gala y me ha envuelto en un manto de triunfo, como a una novia que se adorna con sus joyas.
RESPONSORIO BREVE
V. El Señor la eligió y la predestinó.R. El Señor la eligió y la predestinó.
V. La hizo morar en su templo santo.R. Y la predestinó.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.R. El Señor la eligió y la predestinó.
CÁNTICO EVANGÉLICO
Ant. Excelsa Reina del mundo, siempre Virgen María, tú engendraste a Cristo, Señor y Salvador de todos los hombres.
Cántico de Zacarías. EL MESÍAS Y SU PRECURSOR Lc 1, 68-79
Bendito sea el Señor, Dios de Israel,porque ha visitado y redimido a su pueblo.suscitándonos una fuerza de salvaciónen la casa de David, su siervo,según lo había predicho desde antiguopor boca de sus santos profetas:
Es la salvación que nos libra de nuestros enemigosy de la mano de todos los que nos odian;ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres,recordando su santa alianzay el juramento que juró a nuestro padre Abraham.
Para concedernos que, libres de temor,arrancados de la mano de los enemigos,le sirvamos con santidad y justicia,en su presencia, todos nuestros días.
Y a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo,porque irás delante del Señora preparar sus caminos,anunciando a su pueblo la salvación,el perdón de sus pecados.
Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,nos visitará el sol que nace de lo alto,para iluminar a los que viven en tinieblay en sombra de muerte,para guiar nuestros pasospor el camino de la paz.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Excelsa Reina del mundo, siempre Virgen María, tú engendraste a Cristo, Señor y Salvador de todos los hombres.
PRECES
Elevemos nuestras súplicas al Salvador, que quiso nacer de María Virgen, y digámosle:
Que tu santa Madre, Señor, interceda por nosotros.
Sol de justicia, a quien María Virgen precedía cual aurora luciente,haz que vivamos siempre iluminados por la claridad de tu presencia.
Palabra eterna del Padre, tú que elegiste a María como arca de tu morada,líbranos de toda ocasión de pecado.
Salvador del mundo, que quisiste que tu Madre estuviera junto a tu cruz,por su intercesión concédenos compartir con alegría tus padecimientos.
Señor Jesús, que colgado en la cruz entregaste María a Juan como madre,haz que nosotros vivamos también como hijos suyos.
Se pueden añadir algunas intenciones libres
Según el mandato del Señor, digamos confiadamente:
Padre nuestro…
ORACION
Señor, Dios nuestro, que nos has dado como madre y como reina a la Madre de tu Hijo, concédenos que, protegidos por su intercesión, alcancemos la gloria que tienes preparada a tus hijos en el reino de los cielos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.R. Amén.
HORA TERCIA
INVOCACIÓN INICIAL
V. Dios mío, ven en mi auxilioR. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.
Himno: EL TRABAJO, SEÑOR, DE CADA DÍA
El trabajo, Señor, de cada díanos sea por tu amor santificado,convierte su dolor en alegríade amor, que para dar tú nos has dado.
Paciente y larga es nuestra tareaen la noche oscura del amor que espera;dulce huésped del alma, al que flaqueadale tu luz, tu fuerza que aligera.
En el alto gozoso del camino,demos gracias a Dios, que nos concedela esperanza sin fin del don divino;todo lo puede en él quien nada puede. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Llamé, y él me respondió.
Salmo 119 – DESEO DE LA PAZ
En mi aflicción llamé al Señor,y él me respondió.Líbrame, Señor, de los labios mentirosos,de la lengua traidora.
¿Qué te va a dar o a mandar Dios,lengua traidora?Flechas de arquero, afiladascon ascuas de retama.
¡Ay de mí, desterrado en Masac,acampado en Cadar!Demasiado llevo viviendocon los que odian la paz;cuando yo digo: «Paz»,ellos dicen: «Guerra».
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Llamé, y él me respondió.
Ant 2. El Señor guarda tus entradas y salidas.
Salmo 120 – EL GUARDIÁN DEL PUEBLO.
Levanto mis ojos a los montes:¿de dónde me vendrá el auxilio?El auxilio me viene del Señor,que hizo el cielo y la tierra.
No permitirá que resbale tu pie,tu guardián no duerme;no duerme ni reposael guardián de Israel.
El Señor te guarda a su sombra,está a tu derecha;de día el sol no te hará daño,ni la luna de noche.
El Señor te guarda de todo mal,él guarda tu alma;el Señor guarda tus entradas y salidas,ahora y por siempre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. El Señor guarda tus entradas y salidas.
Ant 2. Me he alegrado por lo que me dijeron.
Salmo 121 LA CIUDAD SANTA DE JERUSALÉN
¡Qué alegría cuando me dijeron:«Vamos a la casa del Señor»!Ya están pisando nuestros piestus umbrales, Jerusalén.
Jerusalén está fundadacomo ciudad bien compacta.Allá suben las tribus,las tribus del Señor,
según la costumbre de Israel,a celebrar el nombre del Señor;en ella están los tribunales de justiciaen el palacio de David.
Desead la paz a Jerusalén:«Vivan seguros los que te aman,haya paz dentro de tus muros,seguridad en tus palacios.»
Por mis hermanos y compañeros,voy a decir: «La paz contigo.»Por la casa del Señor, nuestro Dios,te deseo todo bien.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Me he alegrado por lo que me dijeron.
LECTURA BREVE Rm 12, 17a. 19b-20a. 21
No devolváis a nadie mal por mal. Dice la Escritura: «Es mía la venganza; mía la recompensa; palabra del Señor.» Pero también dice: «Si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, dale de beber.» No te dejes vencer del mal, sino vence el mal con el bien.
V. La misericordia del Señor dura siempre.R. Su justicia para los que guardan su alianza.
ORACIÓN
OREMOS.Señor Jesucristo, tú que en la hora de tercia fuiste llevado al suplicio de la cruz por la salvación del mundo; ayúdanos a llorar nuestros pecados y a evitar las faltas en lo porvenir. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.Amén.
CONCLUSIÓN
V. Bendigamos al Señor.R. Demos gracias a Dios.
HORA SEXTA
INVOCACIÓN INICIAL
V. Dios mío, ven en mi auxilioR. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.
Himno: EL PAN DE CADA DÍA
El pan de cada díadánoslo hoy, Señor, a manos llenas;convierte en alegríanuestras labores buenasy acaricia el dolor de nuestras penas.
¡Horas de tedio largassin la presencia buena de tus manos!¡Ay, las horas amargasnos vuelven inhumanos,si no abrimos el alma a los hermanos!
Santifica el momentode este ruido tenaz, de esta fatiga.Busquemos el alientode tu presencia amigaque acreciente el esfuerzo y nos bendiga. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Tú que habitas en el cielo, ten misericordia de nosotros.
Salmo 122 – EL SEÑOR, ESPERANZA DEL PUEBLO
A ti levanto mis ojos,a ti que habitas en el cielo.Como están los ojos de los esclavosfijos en las manos de sus señores,
como están los ojos de la esclavafijos en las manos de su señora,así están nuestros ojosen el Señor, Dios nuestro,esperando su misericordia.
Misericordia, Señor, misericordia,que estamos saciados de desprecios;nuestra alma está saciadadel sarcasmo de los satisfechos,del desprecio de los orgullosos.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Tú que habitas en el cielo, ten misericordia de nosotros.
Ant 2. Nuestro auxilio es el nombre del Señor.
Salmo 123 – NUESTRO AUXILIO ES EL NOMBRE DEL SEÑOR
Si el Señor no hubiera estado de nuestra parte-que lo diga Israel-,si el Señor no hubiera estado de nuestra parte,cuando nos asaltaban los hombres,nos habrían tragado vivos:tanto ardía su ira contra nosotros.
Nos habrían arrollado las aguas,llegándonos el torrente hasta el cuello;nos habrían llegado hasta el cuellolas aguas espumantes.
Bendito el Señor, que no nos entregócomo presa a sus dientes;hemos salvado la vida como un pájarode la trampa del cazador:la trampa se rompió y escapamos.
Nuestro auxilio es el nombre del Señor,que hizo el cielo y la tierra.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Nuestro auxilio es el nombre del Señor.
Ant 2. El Señor rodea a su pueblo ahora y por siempre.
Salmo 124 – EL SEÑOR VELA POR SU PUEBLO.
Los que confían en el Señor son como el monte Sión:no tiembla, está asentado para siempre.
Jerusalén está rodeada de montañas,y el Señor rodea a su puebloahora y por siempre.
No pesará el cetro de los malvadossobre el lote de los justos,no sea que los justos extiendansu mano a la maldad.
Señor, concede bienes a los buenos,a los sinceros de corazón;y a los que se desvían por sendas tortuosas,que los rechace el Señor con los malhechores.¡Paz a Israel!
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. El Señor rodea a su pueblo ahora y por siempre.
LECTURA BREVE 1Jn 3, 6
En esto hemos conocido el amor: en que él dio su vida por nosotros. También nosotros debemos dar nuestra vida por los hermanos.
V. Dad gracias al Señor porque es bueno.R. Porque es eterna su misericordia.
ORACIÓN
OREMOS.Señor Jesucristo, tú que a la hora de sexta subiste a la cruz por nuestra salvación mientras el mundo vivía sumergido en las tinieblas; concédenos que tu luz nos ilumine siempre para que, guiados por ella, podamos alcanzar la vida eterna. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.Amén.
CONCLUSIÓN
V. Bendigamos al Señor.R. Demos gracias a Dios.
HORA NONA
INVOCACIÓN INICIAL
V. Dios mío, ven en mi auxilioR. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.
Himno: FUNDAMENTO DE TODO LO QUE EXISTE
Fundamento de todo lo que existe,de tu pueblo elegido eterna roca,de los tiempos Señor, que prometistedar tu vigor al que con fe te invoca.
Mira al hombre que es fiel y no te olvida,tu Espíritu, tu paz háganlo fuertepara amarte y servirte en esta viday gozarte después de santa muerte.
Jesús, Hijo del Padre, ven aprisaen este atardecer que se avecina,serena claridad y dulce brisaserá tu amor que todo lo domina. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Mucha paz tienen, Señor, los que aman tus leyes.
Salmo 118, 161-168
Los nobles me perseguían sin motivo,pero mi corazón respetaba tus palabras;yo me alegraba con tu promesa,como el que encuentra un rico botín;detesto y aborrezco la mentira,y amo tu voluntad.
Siete veces al día te alabopor tus justos mandamientos;mucha paz tienen los que aman tus leyes,y nada los hace tropezar;aguardo tu salvación, Señor,y cumplo tus mandatos.
Mi alma guarda tus preceptosy los ama intensamente;guardo tus decretos,y tú tienes presente mis caminos.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Mucha paz tienen, Señor, los que aman tus leyes.
Ant 2. El grupo de los creyentes tenía un solo corazón y una sola alma.
Salmo 132 – FELICIDAD DE LA CONCORDIA FRATERNA
Ved qué paz y qué alegría,convivir los hermanos unidos.
Es ungüento precioso en la cabeza,que va bajando por la barba,que baja por la barba de Aarón,hasta la franja de su ornamento.
Es rocío del Hermón, que va bajandosobre el monte Sión.Porque allí manda el Señor la bendición:la vida para siempre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. El grupo de los creyentes tenía un solo corazón y una sola alma.
Ant 2. Defiéndeme de la mano perversa, Señor Dios, mi fuerte salvador.
Salmo 139, 1-9. 13-14 – TÚ ERES MI REFUGIO
Líbrame, Señor, del malvado,guárdame del hombre violento,que planean maldades en su corazóny todo el día provocan contiendas;afilan sus lenguas como serpientes,con veneno de víboras en los labios.
Defiéndeme, Señor, de la mano perversa,guárdame de los hombres violentos,que preparan zancadillas a mis pasos.Los soberbios me esconden trampas;los perversos me tienden una redy por el camino me colocan lazos.
Pero yo digo al Señor: «Tú eres mi Dios»;Señor, atiende a mis gritos de socorro;Señor Dios, mi fuerte salvador,que cubres mi cabeza el día de la batalla.
Señor, no le concedas sus deseos al malvado,no des éxito a sus proyectos.
Yo sé que el Señor hace justicia al afligidoy defiende el derecho del pobre.Los justos alabarán tu nombre,los honrados habitarán en tu presencia.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Defiéndeme de la mano perversa, Señor Dios, mi fuerte salvador.
LECTURA BREVE 1Jn 4, 9-11
En esto se manifestó el amor que Dios nos tiene: en que Dios envió al mundo a su Hijo único para que vivamos por medio de él. En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y nos envió a su Hijo como propiciación por nuestros pecados. Queridos, si Dios nos amó de esta manera, también nosotros debemos amarnos unos a otros.
V. Fíjate, ¡oh Dios!, en nuestro Escudo.R. Mira el rostro de tu Ungido.
ORACIÓN
OREMOS.Señor Jesucristo, tú que, crucificado a la hora de nona, diste al ladrón arrepentido el reino eterno; míranos a nosotros, que como él confesamos nuestras culpas, y concédenos poder entrar, también como él, después de la muerte, en tu paraíso. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.Amén.
CONCLUSIÓN
V. Bendigamos al Señor.R. Demos gracias a Dios.
VÍSPERAS(Oración de la tarde)
INVOCACIÓN INICIAL
V. Dios mío, ven en mi auxilioR. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.
Himno: DE HERMOSAS CONTRADICCIONES
De hermosas contradiccioneste vemos, Reina, adornada,muy mujer para divina,muy celestial para humana.
Con admiración, en ellase ve la ley derogada,muy humilde para Reina,muy exenta para esclava.
Por su caudillo la tienenlas celestiales escuadras,para combatir muy tierna,para niña muy armada.
La dignidad de que gozacon su modestia batalla,para mandar muy pequeña,para humillarse muy alta.
Une en sus divinos ojosal temor la confianza,muy terrible para hermosa,para espantar muy amada.
Colocada en el empíreo,en la celestial morada,corto solio a su grandeza,a su humildad mucho alcázar. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Día tras día te bendeciré, Señor, y explicaré tus proezas.
Salmo 144 I – HIMNO A LA GRANDEZA DE DIOS.
Te ensalzaré, Dios mío, mi rey;bendeciré tu nombre por siempre jamás.
Día tras día te bendeciréy alabaré tu nombre por siempre jamás.
Grande es el Señor, merece toda alabanza,es incalculable su grandeza;una generación pondera tus obras a la otra,y le cuenta tus hazañas.
Alaban ellos la gloria de tu majestad,y yo repito tus maravillas;encarecen ellos tus temibles proezas,y yo narro tus grandes acciones;difunden la memoria de tu inmensa bondad,y aclaman tus victorias.
El Señor es clemente y misericordioso,lento a la cólera y rico en piedad;el Señor es bueno con todos,es cariñoso con todas sus creaturas.
Que todas tus creaturas te den gracias, Señor,que te bendigan tus fieles;que proclamen la gloria de tu reinado,que hablen de tus hazañas;
explicando tus proezas a los hombres,la gloria y majestad de tu reinado.Tu reinado es un reinado perpetuo,tu gobierno va de edad en edad.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Día tras día te bendeciré, Señor, y explicaré tus proezas.
Ant 2. Los ojos de todos te están aguardando, Señor, tú estás cerca de los que te invocan.
Salmo 144 II
El Señor es fiel a sus palabras,bondadoso en todas sus acciones.El Señor sostiene a los que van a caer,endereza a los que ya se doblan.
Los ojos de todos te están aguardando,tú les das la comida a su tiempo;abres tú la mano,y sacias de favores a todo viviente.
El Señor es justo en todos sus caminos,es bondadoso en todas sus acciones;cerca está el Señor de los que lo invocan,de los que lo invocan sinceramente.
Satisface los deseos de sus fieles,escucha sus gritos, y los salva.El Señor guarda a los que lo aman,pero destruye a los malvados.
Pronuncie mi boca la alabanza del Señor,todo viviente bendiga su santo nombrepor siempre jamás.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Los ojos de todos te están aguardando, Señor, tú estás cerca de los que te invocan.
Ant 3. Justos y verdaderos son tus caminos, ¡oh Rey de los siglos!
Cántico: CANTO DE LOS VENCEDORES Ap 15, 3-4
Grandes y maravillosas son tus obras,Señor, Dios omnipotente,justos y verdaderos tus caminos,¡oh Rey de los siglos!
¿Quién no temerá, Señor,y glorificará tu nombre?Porque tú solo eres santo,porque vendrán todas las nacionesy se postrarán en tu acatamiento,porque tus juicios se hicieron manifiestos.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Justos y verdaderos son tus caminos, ¡oh Rey de los siglos!
LECTURA BREVE Ga 4, 4-5
Cuando se cumplió el tiempo, envió Dios a su Hijo, nacido de una mujer, nacido bajo la ley, para rescatar a los que estaban bajo la ley, para que recibiéramos el ser hijos por adopción.
RESPONSORIO BREVE
V. Alégrate, María, llena de gracia, el Señor está contigo.R. Alégrate, María, llena de gracia, el Señor está contigo.
V. Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre.R. El Señor está contigo.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.R. Alégrate, María, llena de gracia, el Señor está contigo.
CÁNTICO EVANGÉLICO
Ant. Dichosa tú, María, porque has creído lo que te ha dicho el Señor; por eso reinas ya eternamente con Cristo.
Cántico de María. ALEGRÍA DEL ALMA EN EL SEÑOR Lc 1, 46-55
Proclama mi alma la grandeza del Señor,se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:su nombre es santo,y su misericordia llega a sus fielesde generación en generación.
El hace proezas con su brazo:dispersa a los soberbios de corazón,derriba del trono a los poderososy enaltece a los humildes,a los hambrientos los colma de bienesy a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo,acordándose de su misericordia-como lo había prometido a nuestros padres-en favor de Abraham y su descendencia por siempre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre,por los siglos de los siglos. Amén
Ant. Dichosa tú, María, porque has creído lo que te ha dicho el Señor; por eso reinas ya eternamente con Cristo.
PRECES
Proclamemos las grandezas de Dios Padre todopoderoso, que quiso que todas las generaciones felicitaran a María, la madre de su Hijo, y supliquémosle diciendo:
Mira a la llena de gracia y escúchanos.
Señor, Dios nuestro, admirable siempre en tus obras, que has querido que la inmaculada Virgen María participara en cuerpo y alma de la gloria de Jesucristo,haz que todos tus hijos deseen y caminen hacia esta misma gloria.
Tú que nos diste a María por Madre, concede por su mediación salud a los enfermos, consuelo a los tristes, perdón a los pecadoresy a todos abundancia de salud y de paz.
Tú que hiciste de María la llena de gracia,concede la abundancia de tu gracia a todos los hombres.
Haz, Señor, que tu Iglesia tenga un solo corazón y una sola alma por el amor,y que todos los fieles perseveren unánimes en la oración con María, la madre de Jesús.
Se pueden añadir algunas intenciones libres
Tú que coronaste a María como reina del cielo,haz que los difuntos puedan alcanzar con todos los santos la felicidad de tu reino.
Confiando en el Señor que hizo obras grandes en María, pidamos al Padre que colme también de bienes al mundo hambriento:
Padre nuestro…
ORACION
Señor, Dios nuestro, que nos has dado como madre y como reina a la Madre de tu Hijo, concédenos que, protegidos por su intercesión, alcancemos la gloria que tienes preparada a tus hijos en el reino de los cielos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.R. Amén.
COMPLETAS
(Oración antes del descanso nocturno)
INVOCACIÓN INICIAL
V. Dios mío, ven en mi auxilioR. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.
EXAMEN DE CONCIENCIA
Hermanos, habiendo llegado al final de esta jornada que Dios nos ha concedido, reconozcamos sinceramente nuestros pecados.
Yo confieso ante Dios todopoderosoy ante vosotros, hermanos,que he pecado muchode pensamiento, palabra, obra y omisión:por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa.
Por eso ruego a santa María, siempre Virgen,a los ángeles, a los santos y a vosotros, hermanos,que intercedáis por mí ante Dios, nuestro Señor.
V. El Señor todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna.R. Amén.
Himno: CUANDO LA LUZ DEL SOL ES YA PONIENTE
Cuando la luz del sol es ya poniente,gracias, Señor, es nuestra melodía;recibe, como ofrenda, amablemente,nuestro dolor, trabajo y alegría.
Si poco fue el amor en nuestro empeñode darle vida al día que fenece,convierta en realidad lo que fue un sueñotu gran amor que todo lo engrandece.
Tu cruz, Señor, redime nuestra suertede pecadora en justa, e iluminala senda de la vida y de la muertedel hombre que en la fe lucha y camina.
Jesús, Hijo del Padre, cuando avanzala noche oscura sobre nuestro día,concédenos la paz y la esperanzade esperar cada noche tu gran día. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Señor, Dios mío, de día te pido auxilio, de noche grito en tu presencia.
Salmo 87 – ORACIÓN DE UN HOMBRE GRAVEMENTE ENFERMO
Señor, Dios mío, de día te pido auxilio,de noche grito en tu presencia;llegue hasta ti mi súplica,inclina tu oído a mi clamor.
Porque mi alma está colmada de desdichas,y mi vida está al borde del abismo;ya me cuentan con los que bajan a la fosa,soy como un inválido.
Tengo mi cama entre los muertos,como los caídos que yacen en el sepulcro,de los cuales ya no guardas memoria,porque fueron arrancados de tu mano.
Me has colocado en lo hondo de la fosa,en las tinieblas del fondo;tu cólera pesa sobre mí,me echas encima todas tus olas.
Has alejado de mí a mis conocidos,me has hecho repugnante para ellos:encerrado, no puedo salir,y los ojos se me nublan de pesar.
Todo el día te estoy invocando,tendiendo las manos hacia ti.¿Harás tú maravillas por los muertos?¿Se alzarán las sombras para darte gracias?
¿Se anuncia en el sepulcro tu misericordia,o tu fidelidad en el reino de la muerte?¿Se conocen tus maravillas en la tinieblao tu justicia en el país del olvido?
Pero yo te pido auxilio,por la mañana irá a tu encuentro mi súplica.¿Por qué, Señor, me rechazasy me escondes tu rostro?
Desde niño fui desgraciado y enfermo,me doblo bajo el peso de tus terrores,pasó sobre mí tu incendio,tus espantos me han consumido:
me rodean como las aguas todo el día,me envuelven todos a una;alejaste de mí amigos y compañeros:mi compañía son las tinieblas.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Señor, Dios mío, de día te pido auxilio, de noche grito en tu presencia.
LECTURA BREVE Jr 14, 9
Tú estás en medio de nosotros, Señor, tu nombre ha sido invocado sobre nosotros: no nos abandones, Señor Dios nuestro.
RESPONSORIO BREVE
V. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu.R. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu.
V. Tú, el Dios leal, nos librarás.R. Te encomiendo mi espíritu.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.R. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu.
CÁNTICO EVANGÉLICO
Ant. Sálvanos, Señor, despiertos, protégenos mientras dormimos, para que velemos con Cristo y descansemos en paz.
CÁNTICO DE SIMEÓN Lc 2, 29-32
Ahora, Señor, según tu promesa,puedes dejar a tu siervo irse en paz,
porque mis ojos han visto a tu Salvador,a quien has presentado ante todos los pueblos
luz para alumbrar a las nacionesy gloria de tu pueblo Israel.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Sálvanos, Señor, despiertos, protégenos mientras dormimos, para que velemos con Cristo y descansemos en paz.
ORACION
OREMOSSeñor, Dios todopoderoso: ya que con nuestro descanso vamos a imitar a tu Hijo que reposó en el sepulcro, te pedimos que, al levantarnos mañana, lo imitemos también resucitando a una vida nueva. Por Cristo nuestro Señor.Amén.
BENDICIÓN
V. El Señor todopoderoso nos conceda una noche tranquila y una santa muerte.R. Amén.
ANTIFONA FINAL DE LA SANTISIMA VIRGEN
Dios te salve, Reina y Madre de misericordia,vida, dulzura y esperanza nuestra,Dios te salve.
A ti llamamos los desterrados hijos de Eva,a ti suspiramos , gimiendo y llorandoen este valle de lágrimas.
Ea, pues, Señora, abogada nuestra,vuelve a nosotros tus ojos misericordiosos,y después de este destierro muéstranos a Jesús,fruto bendito de tu vientre.
¡Oh clemente, oh piadosa,oh dulce Virgen María!